Lo que más me gusta de la web es navegar sin rumbo, pues se descubren cosas horrorosas y maravillosas como:

– Uno de mis videojuegos favoritos (GTA San Andreas) ha sido prohibí­do en Australia. Increí­ble. Puedes ver terribles pelí­culas (ambas me hicieron vomitar) como Kalifornia, o Rambo, con muertes y violencia a raudales, pero no puedes JUGAR (donde TÚ diriges la acción, y nadie te obliga a hacer nada malo). O sea, que te metan la violencia por las orejas (o por los ojos) está bien, pero que decidas tú no.

– La BBC no sólo libera su contenido bajo Creative Commons, sino que ahora también incita a que creemos con él. Maravilloso. Cada vez más estas iniciativas (como el concurso Mash Up de CC, o el de obra derivada de Claudio Zirotti) son más frecuentes. ESO sí­ es defender la cultura y la creatividad, y no encerrarla en un cajón con candado copyright (por mucho que se le “vista de una seda llamada derechos de autor”). [Nota: CUIDADO con los concursos de obras derivadas que se quieren quedar con los trabajos presentados, como el de David Bowie. TRAIDORES]