Leo en el American Journal of Physiology-Regulatory, Integrative and Comparative Physiology (sí­, ya se que leo cosas muy raras, pero me gusta estar informado de fuentes muy diversas sobre temas muy dispares) que unos cientí­ficos de la Universidad de Wisconsin-Madison han establecido una relación directa entre diversos adenovirus humanos (Ad-37, Ad-36…) y la obesidad.

Ya hace tiempo que se baraja la posibilidad de que la obesidad sea causada por virus debido a su prevalencia (la cual se incrementó el 30% entre 1980 y 1990, y el 61% entre 1990 y 2000), pero hasta ahora no habí­a pruebas concluyentes, pese a que las sospechas eran muy fundadas (con observaciones como que cuando los gemelos humanos tienen discordancia en los anticuerpos de Ad-36, el gemelo anticuerpo-positivo tiene mayor í­ndice de masa corporal).

Como con cualquier descubrimiento cientí­fico, estamos lejos de una vacuna (primero hay que analizar los más de 50 adenovirus humanos, y luego efectuar ensayos con humanos), pero el descubrimiento es prometedor.

[Nota paternalista de divulgador responsable.- Incluso aunque se demostrase que la obesidad la causan adenovirus, una dieta equilibrada y sana, y un régimen sostenido de ejercicio es imprescindible para un correcto desarrollo y una vida saludable. A ver si va a pasar como con los sustitutos de la grasa, el azucar, o el chocolate. Conozco demasiada gente que come como loca, no hace ejercicio, pero “lava su conciencia” poniéndose sacarina en el café.]