Bill, Melinda, y la filantropía como penitencia
Mucho se ha opinado sobre la filantropía de Bill Gates (y la aportación de Warren Buffet).
Yo sólo lanzaré mis tres granitos de arena: -¿Y Melinda? Sólo hay que ver el interés que tenía el Sr. Gates en la filantropía antes de casarse (casi nulo), y el que tiene ahora.
-¿Y el objetivo? Muchos ven una forma de lavar la imagen. Otros de pasar a la posteridad. Otros de genuíno arrepentimiento al haber colaborado al endeudamiento artificial de muchos países. Otros de interés genuíno por ayudar al mundo. Lo cierto es que la verdad no se sabrá nunca. Pero diferenciemos entre lo positivo de sus acciones filantrópicas (nadie lo duda, y todos nos alegramos) de los verdaderos motivos tras ellas (sobre los que sólo podemos elucubrar).
De todos modos, si acaban con las enfermedades, el hambre, etc, aquí tienen una lista (por orden de prioridad) realizada por economistas para las Naciones Unidas de los principales problemas que asolan nuestro planeta. Para mí esa lista tiene un problema en el número 1: se olvidan de que el principal problema de este planeta es el Ser Humano organizado en Sociedades “Avanzadas” (Capitalismo, Armas de Destrucción Masiva, Democracia Representativa, Consumismo Desmedido, etc).
Eso sí, esperemos que se dedique a su nueva función filantrópica con la misma implacabilidad con la que se dedicó a arrasar ilegalmente con la competencia y obstaculizar cualquier iniciativa tecnológica que pudiera significar una amenaza a su mercado, aunque significase un atentado tecnológico contra la humanidad. Lo digo en serio. Suerte Sr. Gates.