Lo hemos oido mil veces: que si no hay patentes no hay incentivo, que si invierten miles de millones en I+D, etc, etc. Pero lo cierto es que las farmacéuticas sólo buscan el beneficio, no el bien de la humanidad. Claro ejemplo de ello es que se centran en tratar sí­ntomas, y no en curar enfermedades.

Pues bien, Avichai “Avi” Kremer (estudiante de un MBA en Harvard) fue diagnosticado en octubre con Esclerosis Lateral Amiotrópica (ALS), conocida como la enfermedad de Lou Gehrig‘s (una enfermedad degenerativa del sistema nervioso central, para la que no hay cura conocida). Como a cualquier paciente al que se le diagnostica, le dijeron que era mortal, y que no vivirí­a más de tres meses.

En vez de entrar en depresión, y morir angustiado preguntándose por qué habrá tenido la mala suerte de contraer una efermedad que sólo sufre “un puñado de gente”, en vez de sufrir algo que afecte a millones y que por lo tanto garantice que las farmacéuticas te vean como un negocio en vez de como una ví­ctima, Avi se puso manos a la obra, y ahora hay seis universidades israelí­es investigando sobre la enfermedad.

Hay otro mundo lejos de las multinacionales, las patentes, y el copyright. -¡Descúbrelo! -¡Inventátelo!