Cuando hablan del sector de “Ocio y cultura” hay gato encerrado.

Vaya por delante mi fe en el sector, y mi auténtica convicción de que un sano y justo comercio es positivo para la difusión de parte de la cultura. PERO, cuando nos intentan “vender la moto”, entonces hay que poner los puntos sobre las ies.

En este artí­culo se habla de la importancia económica, estadí­sticamente hablando, del sector. Ahora bien, en el “sector” entran cosas como: publicidad, ferias y salones recreativos, loterí­as y apuestas.

También es significativo el déficit de la balanza comercial, el 87,5% del cual es del sector audiovisual, que demuestra, no sólo que la mayorí­a de los espectadores son poco exigentes (que los cinéfilos de verdad no se sientan atacados), sino y sobretodo que la distribución está oligopolí­sticamente (y con tácticas anticompetencia) en manos de cuatro multinacionales norteamericanas.