Según la noticia que publica hoy El País (gracias KC), hay serios indicios de que Cela, nuestro laureado Premio Nobel de literatura, plagiase una obra.

De demostrarse ciertas las acusaciones, lo peor no sería esto, sino que le facilitasen u ordenasen el plagio para que ganase el premio Planeta.

En cualquier caso, cada vez tengo más claro que a los que se les llena la boca con palabros como “autor”, “obra”, “cultura”… mientras exigen su “protección” mirando por encima del hombro a aquellos que consideran delincuentes y clientes (nunca contribuyentes, autores amateur e independientes, críticos, disfrutadores del placer de las creaciones intelectuales, etc) habría que cerrársela a patadas. Lo siento pero se me acabó la paciencia para los compromisos, lo políticamente correcto, y demás cursilerías de sociedad decadente, débil y temerosa.