Leo en el Indianapolis Star que el 2 de junio el Methodist Hospital rechazó a los pacientes que llegaban en ambulancia porque su sistema informático (datos de paciente y facturación) falló debido a un problema eléctrico, y cuando intentaron hacer las cosas “a mano, y en papel”, no pudieron.

Puntos interesantes en esta historia:

  • El dinero está por encima del cuidado al paciente
  • Dependencia total de la tecnología
  • No prever fallos en el sistema y estar preparado puede llevar a verdaderas catástrofes
  • Si los sistemas son privativos, el tiempo de resolución de problemas depende únicamente del proveedor