Thomas L. Friedman, en su artículo “Trucks, trains and tres” del International Herald Tribune del pasado día 12, dice que las emisiones de CO2 de TODOS los coches, trenes, aviones, y barcos del mundo juntos son MENOS que las que se producen (el 17% del total) por quemar la selva tropical para deforestarla.

Ya hemos permitido que desaparezca el 20% de dichas selvas. ¿Vamos a permitir que sigan y encima nos llamen a nosotros “consumistas contaminadores”?