En instructables encontramos este detallado proceso de cómo convertir origami en un objeto plastificado.

Citando a J. Conrad: “The horror, the horror”.

Origami, oriental, es esencia, delicadeza, efímero, aquí y ahora, natural, autosuficiente, manual…

El plástico, occidental, el proceso de plastificado, es artificio, superficialidad, duradero, dependiente…

Como cultura, estamos asesinando la esencia.