La tecnología se hace cada vez más fáci de emplear. Por ejemplo, las distros de GNU/Linux: cualquiera pueda hacer la suya. ¿Significa eso que todo el mundo debería hacerlo? ¿Por qué no? Pero por otra parte, terminamos con cosas como Ubuntu Satanic (y su Ubuntu SE 666.10 “Necrophiliac Neuromancer”), Hannah Montana Linux (¿hasta a dónde hay que llegar para atraer a los niños al software libre?), o Red Star OS (¿software libre para Corea del Norte, y navegación no libre? ¿WTF?).

¿No debería la gente invertir su tiempo en cosas más productivas/interesantes/divertidas?

Por supuesto, los gobiernos tienen sus propias intenciones con respecto al desarrollo y uso de la tecnología. Algunos ejemplos: desde los esfuerzos de lavado de cerebro de Ready.gov (con su sección Ready Kids explicando la de cosas terribles que le pueden pasar a tu familia), al Departamento del Tesoro en su Treasury Direct Kids hablando de “valores a prueba de inflación”, el Bureau of Engraving and Printing donde puedes comprar moneda de edición limitada (sic), la Oficina para la ética Gubernamental (probablemente la web menos visitada del mundo), o la iniciativa de misiles Star Wars de la Missile Defense Agency. Supongo que cuando crees que el mundo es tuyo (DoD Unified Command Plan), todo vale. Fuente.