Tras la semana de locos en el MIT, de vuelta en NY necesité un par de días de dormir y relax para regresar al ritmo habitual. Por suerte era el fin de semana de la SuperBowl, así que las calles (y el Mercado de Chelsea) ¡estaban casi vacíos!

Así que el martes ya estaba a todo ritmo. Primero me reuní con P. Oberton en la NYPL, luego fui al edificio de Condé Nast, a la Revista Wired, para hablar de una campaña/proyecto de RRPP junto con el Conseller de Economía e Industria Valenciano Máximo Buch.

Después fui con Ken Morse al cocktail de recepción del Smart Camp de IBM (en la sede de IBM en Manhattan) donde conocí a unos estupendos emprendedores que me contaron sobre sus emocionantes empresas. Al final de la tarde ya había establecido pre-acuerdos comerciales con dos de ellos.