El sábado nos dirigimos a Zaragoza y San Sebastián (España).

El trayecto de Valencia a Zaragoza es fácil, todo autopista. Cuando llegamos, fuimos directamente a IAACC (Instituto Aragonés de Arte y Cultura Contemporánea) para ver la exposición (de la cual apenas tuvimos tiempo de ver una pequeña parte de, ya que cierran para almorzar) y para almorzar en su excelente restaurante Quema (del cual desafortunadamente no pudimos disfrutar, ya que estaba completamente reservado para las celebraciones de Comuniones). Así que tuvimos que conformarnos con el Café de Levante, establecido en 1895, donde el tiempo parece haberse detenido. Allí comimos tortilla de patatas, croquetas y un delicioso helado de leche merengada con chocolate caliente. Después dimos un paseo por la Plaza Pilar y regresamos al coche.

Luego continuamos conduciendo hacia San Sebastián. Caminamos por el paseo de la playa de la Concha, y tomamos pintxos para cenar en Borda Berri, y en La Cuchara de San Telmo, finalizando el recorrido culinario en Bar La viña, donde hacen el mejor pastel de queso del mundo. En serio. Después de eso fuimos a Bilbao y nos registramos en nuestro hotel, el Gran Hotel Domine.