Un día en Padova (Padua), visitando la Basilica di Sant’Antonio y sus impresionantes frescos.

El día comenzó trabajando desde el camarote, pero tan pronto como terminé con mis reuniones, nos subimos a un autobús y nos fuimos a la ciudad.

Padua es una ciudad muy bonita. Nuestro guía nos llevó desde Caffè Pedrocchi hasta la verdaderamente memorable Basílica de Sant’Antonio, con varias paradas en el camino.

Nos burlamos del hecho de que los italianos no tienen vergüenza a la hora de vender. Por ejemplo, el guía admitió haber inventado un par de “hechos históricos” (sobre el podio de Galileo en la Universidad y sobre la casa de Dante). Se rió de eso cuando le echamos en cara los hechos reales y su falta de evidencia. Porque, al fin y al cabo, todo es un cuento, más que historia, ¿no?

Aquí van algunas fotos.