Aunque a estas alturas no se duda del impacto de la hipnosis, sus mecanismos no se habían determinado… hasta ahora. Según un estudio publicado en la edición del 25 de junio de la revista Neuron, un grupo de investigadores del Centro de Neurociencias y la Facultad de Medicina de la Universidad de Ginebra (Suiza) ha llevado a cabo un experimento para comprobar mediante resonancia magnética funcional (fMRI) los circuitos motores e inhibidores del cerebro durante parálisis inducida por hipnosis.
Hay un enorme y complejo debate sobre el cambio climático, el calentamiento global, etc.
Yo no entiendo de estas cosas, pero los datos de la NASA parecen bastante irrefutables:
Leo en el Indianapolis Star que el 2 de junio el Methodist Hospital rechazó a los pacientes que llegaban en ambulancia porque su sistema informático (datos de paciente y facturación) falló debido a un problema eléctrico, y cuando intentaron hacer las cosas “a mano, y en papel”, no pudieron.
Puntos interesantes en esta historia:
El dinero está por encima del cuidado al paciente Dependencia total de la tecnología No prever fallos en el sistema y estar preparado puede llevar a verdaderas catástrofes Si los sistemas son privativos, el tiempo de resolución de problemas depende únicamente del proveedor
Bill me envía esta inquietante noticia. Esperemos que la práctica no se expanda más allá de Norteamérica.
Durante la conferencia de TERENA (donde impartí un par de ponencias) ha habido acceso wifi en el autobús número 20 de la EMT de Málaga (aunque solo con acceso a EDUROAM, para la comunidad académica). [Corrección]: Victoriano, responsable del invento, me confirmó que gestionaban 1.000.000 emails diarios en el bus la Universidad de Málaga y más del 90% eran spam.
¿Por qué tanta guerra y debate con el ©, cuando el spam causa pérdidas, irritaciones, saturación, y problemas mucho mucho mayores que el anacronismo y falta de miras de las multinacionales del entretenimiento?
Según un estudio publicado en el American Journal of Medicine, mientras que en 2001 el 46% de las bancarrotas en EEUU se debían a gastos médicos, en 2007 ese porcentaje se ha incrementado a más del 60%.
Durante décadas los sismólogos han estado filtrando el ruido de las olas causadas por tormentas, que interferían con sus mediciones. Un nuevo estudio ha demostrado que estos ruidos son un excelente (y estable) método para medir el avance del cambio climático.
Dicho cambio climático, por cierto, conlleva el famoso “calentamiento global”. Pues bien, según un modelo informático muy muy detallado del MIT, dicho calentamiento global durante este siglo va a ser el doble de lo previsto hace sólo 6 años.