Por una parte webalizer dice que mi blog tiene más de 130.000 visitas al mes (mes de Marzo 2007), por otra Astats dice que poco más de 85.000, y por otra ClustrMaps en su precioso mapa (en el que se nota que America y Europa van por un lado y Asia y Africa por otro) dice que no llega a 9.000 (aunque reconocen que no cuentan todas las que hay).
Los números no mienten (aunque la prensa sí): en España (según cifras oficiales del Banco de España) el 65% del dinero en curso corresponde a billetes de 500 euros. Sí, de esos que ni tú ni tu vecino habéis visto nunca. Con 112 millones de estos billetes (lo que representa el 26‘6% del total de la Comunidad Europea), somos el país que más billetes de 500 euros tiene. Lo que es más, desde la entrada en vigor del euro, se ha incrementado un 860% la cantidad de billetes de 500 euros en España.
Una desgracia habitual en nuestra sociedad, fomentada por los medios de comunicación, es la exaltación de los tipos equivocados de “héroes”: personajes de la farándula, deportistas, adinerados…
Chavales, despertad, no vais a ser cracks del fútbol, estrellas de rock ni famélicas supermodelos. Ni deberíais desearlo. Más nos valdría a todos que prefiriéseis estudiar, y fijaros más en lo que os rodea, y cómo mejorarlo.
-¿Cuándo perdimos la capacidad de asombrarnos por los verdaderos héroes?
Cumpleaños, aniversarios, años nuevos… total, otra vuelta alrededor del sol. Es normal la necesidad de cuantificación, y las fases y periodos definidos. Pero, -¿por qué esa obsesión por celebrar arbitrarias medidas temporales?
Ya hablé hace tiempo de In-Q-Tel (el fondo de capital riesgo del Pentágono). Aquí tenéis de forma gráfica (gracias a Group Scope) sus conexiones, enlaces, intereses…
En el post que escribí el pasado 29 de marzo titulado Probado el nexo entre la SGAE y los jueces, se me olvidó poner el enlace a la noticia referenciada de El País. Ya está corregido. Por cierto, todo esto sale por que el tal Edmundo Rodriguez Achustegui (director del boletin además de Portavoz de la Asociación) es el magistrado que ha dictado sentencia contra una tienda en Bilbao. El recurso ya está presentado solicitando la nulidad de la sentencia.
Hoy he decidido no coger el iPod para pasear por el centro. He decidido que mis oídos captasen los que me rodea. Y es increíble lo que nos perdemos (bueno y malo) al llevar auriculares.
Pero más interesante ha sido bailar sin música: una de esas situaciones en la que el camino de dos personas se cruza en una acera, y las dos, de modo muy curioso, deciden rectificar sus caminos, haciéndolos coincidir una y otra vez.
